Yo nací en un pueblo de León, en una casa que estaba junto a un río, precisamente el «río del olvido» al que se refiere en la obra que lleva ese título mi paisano Julio Llamazares.
Mi más tierna infancia está marcada por ese río copando la mayor parte de mis recuerdos de niñez. Otro río de León acompañó mi adolescencia y me marcó de forma indeleble, el río Sil, en cuyo cauce dicen se encontraron pepitas de oro y que hoy riega los «Albariños de la Riveira Sacra» en su paso por Galicia.
Esos dos ríos leoneses marcan más que ninguna otra cosa mi pertenencia a aquella tierra. He soñado con esos ríos y los he añorado, pero casi nunca los he pintado.
Fue con el traslado de mi familia a Catalunya que DESCUBRÍ el MEDITERRÁNEO. Mi impresión fue tremenda e instantánea y sin olvidar mis ríos, lo cual sería tanto como renunciar a mis raíces, me enamoré del mar, de la mar Mediterránea sin cuya cercanía me siento fuera de mi entorno.
En Catalunya descubrí el Mediterráneo y eché raíces. La serie «Mediterránea» de Muxart me descubrió la enorme fuerza plástica de la costa catalana y desde entonces entre mis temas pictóricos no pueden faltar las marinas… pero fue la mediterránea del levante almeriense la que penetró en mi con mayor intensidad, la costa de Mojacar, del Cabo de Gata con una belleza genesíaca cuando no apocalíptica, con su sorprendente variedad, saciaron de tal forma mi sed de emociones plásticas que me vi arrebatado a intentar expresarlo y capturarlo en el lienzo para mantener conmigo su flujo de emociones, siempre nuevas siempre cambiantes y a menudo sorprendentes.
Desde hace veinte años me sumerjo en la mediterránea de Almería, pero no pinto del natural, allí lo disfruto, la poseo y es más tarde en mi estudio con la nostalgia de sus negras rocas azotadas por el viento de levante, que pinto. Pinto compulsivamente y me sumerjo en la pintura del mismo modo que antes me sumergía en sus aguas hasta el punto que me envuleve su característico e inconfundible aroma de yodo.
No utilizo imágenes para el recuerdo, pinto directamente sobre el lienzo, reconstruyo e intensifico mis vivencias, mis experiencias como amante apasionado… Experiencias intensas y verdaderas, que como dijo Valle Inclán:
«La pintura debe ser la verdad, vista a través del recuerdo»
Dr. Federico Fernández Díez
Director de la Obra Social y Cultural
Fundación Universitaria Iberoamericana (FUNIBER)
Federico Fernández «Descubrir el Mediterráneo» Del 22 de Noviembre de 2006 al 21 de Enero de 2007
Exposición en la Sala Cultural de la Fundación Universitaria Iberoamericana (FUNIBER) en Barcelona – Paseo García Faria, 29 – 08005
* Más informaciones al teléfono 93 493 99 00 o al email: funiber@funiber.org